Me acabo de enamorar. Es coger entre las manos los ositos en esta deliciosa edición de cartón y caer rendida a la primera infancia. Esa en la que los rechonchos no lectores empiezan a desarrollar su motricidad descubriendo el mundo que les rodea, incluido el maravilloso tacto de los cuentos que serán el estímulo más preciado por los adultos que los observamos. Samba Panda con Osito ya fue un cuento para disfrutar, pero hay que reconocer que esta nueva entrega es mucho mejor. En edición, contenido e ilustración. Sigue siendo sencillo, amoroso y atractivo para los pequeños de la casa, sin embargo es mucho más completo para los adultos que tienen que llevar el «ritmo».

Samba Panda con papá se compone de diversos ejercicios de piscomotricidad que realizan Osito y su papá y que sirven de modelo para realizarlo con los pequeños a la vez que los iniciamos en el mundo de los libros. Está recomendado a partir de dos años, pero os aseguro que tanto antes como mucho años después, este cuento de cartoné es una pura monada. Es muy práctico para ejercitar movimientos, para descubrir un personaje chulísimo en el comienzo de la vida literaria y sobre todo, para aunar vínculos y desarrollar actividades entre adultos y niños donde la guía instructora es Osito y su papá, pero donde el corazón y las ganas las ponéis vosotros.

Los pasos a seguir están claros porque las ilustraciones y el texto que las acompañan están dirigidas a edades tempranas (la entonación con que las leamos corre de nuestra cuenta). Además, cada movimiento lo asemeja a algún animal u objeto que lo hace más sencillo y divertido: el paso de la cereza, el paso de la patata rodante o el paso del bicho bola entre otros. Es pura armonía.

Seguro que os viene a la cabeza la funcionalidad de este cuento editado por Libros del zorro rojo. A parte de la diversión, la educación psicomotriz y los vínculos que genera descubrir a Osito y su papá todos juntos, también es una maravillosa forma de trabajar con niños con diversidad funcional, de hacer más atractivo el a veces insufrible cuadro de ejercicios que mejore cualquier insuficiencia motriz gruesa o fina. O simplemente trabajar con él en grupo haciendo más divertido el necesario complemento físico que ayude al desarrollo. En centros de educación infantil puede ser un arma satisfactoria para cumplir objetivos siguiendo los pasos que nos muestran sin dejar de lado el mundo de los cuentos infantiles tan ilusionantes y necesarios.

Os lo recomiendo mucho. Hay tantas formas de seguir el ritmo de manera positiva que por qué no empezar con los pasos de Samba Panda con Papá.